Despídete de los granitos con la dieta adecuada
Aunque suele considerarse una preocupación básicamente adolescente, el acné afecta a alrededor de un 80% de la población en algún momento de su vida; de hecho, es algo relativamente habitual incluso entrados los treinta. En los últimos años este problema ha ido en aumento y, según un estudio, la mitad de las mujeres lo consideran su principal caballo de batalla a la hora de cuidar la piel.
Tener granitos de adulto puede resultar especialmente frustrante; justo cuando deberías estar preocupándote por los primeros signos de envejecimiento, ¡va, y aparecen las espinillas! Y elegir tus productos de belleza puede convertirse en un auténtico dolor de cabeza si no sabes exactamente a qué te estás enfrentando.
¿Cómo se puede combatir esta doble injusticia y luchar a la vez contra granitos y arrugas? De entrada, una buena noticia: se cree que el incremento del acné adulto se debe a factores ambientales como el estrés, la mala alimentación y la contaminación. Así pues, cambiando ciertos hábitos de tu estilo de vida puedes contribuir a mejorar notablemente el aspecto de tu piel.
Situémonos: ¿qué es el acné?
El acné se debe a la sobreactividad de las glándulas sebáceas que secretan aceites naturales —sebo— en la piel. Las glándulas sebáceas de las personas que sufren de acné parecen ser más sensibles a la hormona testosterona, que las activa para producir sebo. Al mismo tiempo, las células muertas de la piel que recubren las aberturas de los folículos pilosos quizá no son eliminadas correctamente. La suma de estos dos factores causa la obstrucción de estos folículos, lo que lleva a la aparición de espinillas y puntos negros.
La acumulación de aceites en la piel crea el ambiente ideal para que se desarrolle una bacteria llamada Propionibacterium acnes. Normalmente, estas bacterias viven en nuestra piel sin provocar daño alguno, pero cuando se encuentran con este entorno propicio, se multiplican. Se alimentan del sebo y producen sustancias que inducen una respuesta inflamatoria: la hinchazón y las rojeces “rabiosas” típicas de los granos y comezones.
¿Cuáles son los principales causantes del acné?
ESTRÉS
Los expertos coinciden en afirmar que el estrés juega un papel importante en el aumento de casos de acné adulto. Las mujeres también reconocen sufrir más brotes durante temporadas de nerviosismo.
El estrés estimula las glándulas suprarrenales responsables de liberar hormonas como la testosterona, lo que se traduce en una sobreproducción de sebo. Los puntos más conflictivos en este caso suelen ser la mandíbula, el cuello y las sienes.
¿Qué puedes hacer? Obviamente, intentar encontrar formas de gestionar el estrés es clave, aunque no es fácil. La semana que viene hablaré de cómo el estrés afecta negativamente a la piel y daré algunos trucos para manejarlo.
DESEQUILIBRIOS HORMONALES
Los anticonceptivos, el embarazo, la mala alimentación, el estrés y ciertas condiciones de salud pueden provocar alteraciones en el delicado equilibrio hormonal de nuestro cuerpo.
Si este es tu problema, las espinillas aparecerán alrededor de la barbilla y el labio superior. Si los granitos vienen acompañados de más vello corporal, menstruación irregular y aumento de peso, podría ser síntoma del síndrome del ovario poliquístico, que afecta a alrededor del 5-10% de las mujeres. No existe una “cura”, pero algunos cambios de hábitos y alimentación —como reducir el consumo de azúcar— pueden ser de gran ayuda.
¿Qué puedes hacer? Si crees que sufres esta dolencia, consulta a tu médico; pídele consejo para ajustar tu método anticonceptivo, ciertas píldoras pueden ayudar a combatir el acné.
DEMASIADAS TOXINAS
El hígado es el principal órgano de desintoxicación del organismo; su trabajo consiste en descomponer las toxinas procedentes de la dieta y otras sustancias no deseadas — viejas hormonas, por ejemplo— para eliminarlas del cuerpo. Si el hígado no funciona correctamente, pueden aparecer desequilibrios hormonales y problemas en la piel como el acné, pero también la psoriasis o el cutis apagado.
El sistema digestivo también es importante para limpiar el organismo. Una digestión lenta hará las toxinas permanezcan en nuestro cuerpo durante más tiempo, lo que, además de no ser nada bueno para la salud, puede generar la aparición de granos.
¿Qué puedes hacer? Prueba un plan de desintoxicación suave para darle un descanso a tu hígado y a tu sistema digestivo; así podrán eliminar las toxinas acumuladas. Te ayudará mucho incluir en tu dieta diaria un Beauty & Go Detox. Si quieres más información, aquí tienes más datos sobre el tema.
DIETA INADECUADA
Una alimentación deficiente en nutrientes esenciales y fibra, así como un consumo excesivo de azúcar, pueden agravar el acné. Las fluctuaciones de los niveles de azúcar en sangre—causadas los alimentos dulces— llevan a una elevada producción de insulina, una hormona inflamatoria que puede provocar el desequilibrio de otras hormonas que harán funcionar a toda máquina a tus glándulas sebáceas.
¿Qué puedes hacer? Sigue la Dieta para una Piel Impecable que propongo a continuación. Tu piel requiere de 28 días para renovarse, así que ten paciencia porque necesitarás ese tiempo para ver los resultados.
Dieta para una Piel Impecable
LA IMPORTANCIA DE UN CORRECTO RITUAL DE BELLEZA
Aunque la dieta puede hacer que tu piel mejore notablemente, un ritual cosmético diario adecuado es fundamental. No te saltes nunca la limpieza —mañana y noche— y utiliza cremas en texturas ligeras para que no te aporten grasa extra. La exfoliación regular eliminará las células muertas que pueden taponar los poros, y una mascarilla purificante con ácido salicílico una vez a la semana asegurará una desintoxicación profunda de tu piel.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!